- ¿Quieres un abrazo o qué? - dijo él gritando en broma.
- Déjame en paz - respondió ella prácticamente huyendo de él.
- Porque tienes pinta de querer un abrazo, se te nota.
- Normalmente, cuando digo "no quiero un abrazo, ahora déjame sola" es que quiero estar sola.
Él se acercó rápido a ella por detrás y la abrazó. Apoyó la cabeza ligeramente en su hombro. Ella puso sus brazos sobre los de él, agarrándole por las manos.
Pero eso solo duró un momento, un instante. Ella se zafó de él y se puso a ordenar varias cosas que había encima de su mesa.
- Eres un pesado... - murmuró.
- Ya - dijo alargando la a y esbozando una sonrisa. Se alejó de ella y se puso a hablar con otras personas.
Bajó la vista y siguió ordenando cosas que ya lo estaban. Cambiando de sitio con cierto nerviosismo. Luego levantó la cabeza y le observó. El mismo sentimiento de siempre.
Porque pensamos qué decir cuando todo ha sucedido ya.
ya, a eso se le llama tener una capacidad de reacción prácticamente en el pie (que quede claro que el pie significa algo peor y que es mejor no decir en un lugar público como este jeje). Pero exactamente qué quiere decir con el resto?
ResponderEliminarte lo dejo a interpretación libre xD
ResponderEliminarpero para mí es que hay veces que no admitimos lo que queremos de verdad solo por parecer "duro".
Y, claro está, la reacción nula de siempre jejeje